Responde a la elaboración de una serie de procesos los cuales deben de estar continuamente en planificación y desarrollo mediante las adecuadas tareas de seguimiento y evolución.

La evaluación, control y seguimiento se despendre de los estados contables que nos proporcionan diversas herramientas para un óptimo análisis de resultados y toma de decisiones.

La contabilidad tiene un objetivo claro, el suministro de información que resulte útil a los destinatarios de la misma en la toma de sus decisiones al menos respecto a la situación económica-financiera en un momento dado y a los resultados obtenidos durante un periodo de tiempo, tanto para controlar la gestión del pasado, como para efectuar estimaciones sobre el futuro, dotando tales decisiones de racionalidad y eficiencia.